Las Políticas Públicas cambian la vida cotidiana
Cupo Laboral Trans
Cumpliendo con los derechos de las personas travesti trans., las políticas públicas con perspectiva de género han dado un giro el 7 de marzo, en la cronología de la lucha por el derecho al cupo laboral en La Matanza.
Tres personas trans: dos feminidades y un varón- tomaron cargos como auxiliares en escuelas de La Matanza. Se trata de personas mayores teniendo en cuenta que estas personas, en términos estadísticos, tienen una expectativa de vida de 35-40 años.
Mónica, Sol y Mario son sobrevivientes de múltiples violencias y de un sistema de prostitución, ya que nunca habían tenido trabajo formal por ser trans. y travestis. “Entonces esto que se logró nos hace muy felices porque realmente es un Estado presente que repara”, compartió la Lic. Cecilia Turquet, Directora de Protección de Derechos de la Secretaría de Mujeres, Políticas de Género y Diversidades.
El concurso para Auxiliares Escolares concretado el martes 7 de marzo fue histórico y contundente, tanto a nivel simbólico como práctico, y se logró con el acompañamiento de diversas organizaciones, sindicatos así como con el apoyo político de la senadora Ana Devalle y la diputada Brenda Vargas Matyi, quienes pusieron tiempo y cabeza para organizar y concretar este evento.
Cuando la Lic. Turquet tomó la palabra para hablar de la Ley de Cupo Laboral Trans, observó que muchas compañeras y compañeros de la comunidad travesti trans se habían ubicado contra la pared, a un costado y de pie, mientras el resto de las personas se había sentado en las sillas, a lo largo y ancho del salón.
El relato de Cecilia Turquet conmueve:
“Tras la bienvenida se desplegó un aplauso espontáneo por parte de todas las personas presentes. Fue muy emocionante. Cada vez que una persona trans iba a tomar un cargo, lo hacía acompañada y asesorada por nosotras -la Secretaría-, por las compañeras del Consejo Escolar y las de los sindicatos, según sus particularidades, su singularidad, su situación, para determinar qué escuela le convenía. Cuando tomaba efectivamente el cargo una persona travesti trans se desplegaba nuevamente el aplauso, el compañerismo y la alegría del resto. Gente que aunque sabía que no iba a tomar cargo, porque tenía un menor puntaje se quedaba también para acompañar y para vivir esa alegría que realmente fue histórica. No todos los días se ve el acceso al trabajo de personas trans”.